viernes, 15 de junio de 2012


Historia de la calle 10N y el barrio Providencia.


LA CALLE SIN NOMBRE 
Por: Alejandra Marcillo
Melissa Goyeneche

Todos los barrios de la ciudad de Armenia tienen una historia, unas más particulares que otras, esta refleja la falta de unidad que muchas veces se presenta entre sus habitantes.


Jóvenes como Yalile Jurado y Karen Salazar, estudiantes de la Universidad del Quindío y residentes en la calle 10 norte aseguran vivir en el barrio Providencia, sin embargo, según habitantes antiguos del sector como Diego Arango, quien habita el barrio desde hace 40 años, cuenta: “antes, esto solo eran cafetales, veredas, por la carrera 15 pasaba el ferrocarril, anteriormente había un túnel y las casas eran de bareque”.

En los habitantes del sector de la calle 10N entre las carreras 14 y 15 existe una confusión, pues en los documentos de propiedad del inmueble de doña Gilma Ramírez, que reside en esta calle hace 30 años, su casa aparece como parte del barrio Santa Mónica. Según Google Maps este sector hace parte de dicho barrio.

A pesar de las dudas que los invaden, esta calle si tiene una historia y es la misma del barrio Providencia ya que limita con él, además de que sus habitantes se consideran  miembros de este. 

Teresa Villa, integrante de una de las familias fundadoras, escribió en su cuaderno parte de esta historia y asegura que inicialmente, en el año de 1930, don Jorge Sanín tenía un potrero de 276 mts² junto con otros cinco lotes para arrendar a los ganaderos, don Lujiménez (antioqueño) se lo compró en el año de 1942 para la construcción de una capilla, la cual no dieron permiso de construir porque se hallaba cerca el ancianato de San Pedro Claver (inaugurado en el año de 1932)  por lo que construyó una casa para su familia y luego un edificio con su nombre.

Entre los años de 1946 a 1948 se trazaron los predios y quedaron varios lotes, estos fueron aprobados por la Ingeniería Municipal; se llamó Providencia a petición de las hermanas de San Pedro Claver que eran las encargadas del ancianato La Providencia (convento situado en el actual bloque de Ciencias Básicas de la Universidad del Quindío) originalmente tuvo el nombre de Villa Laura.

Actualmente es habitado por personas de diferentes zonas del país, su ubicación a tan solo unos minutos de la Universidad del Quindío permite hacer de este un lugar multicultural habitado en su mayoría por jóvenes estudiantes.

viernes, 8 de junio de 2012


ROMPIENDO PARADIGMAS


“Tímido, solitario y apasionado” estas son las tres palabras que con mucha seguridad utiliza Luis Eduardo Posso para describir su personalidad, sin saber que las dos primeras no concuerdan mucho con la descripción que dan los demás sobre él.


Luis, o ‘yeyé’ como le dicen muchos, en especial su familia -por alguna anécdota familiar que poco recuerdan-, sale todos los días de su apartamento en el sur de Cali con ropa que no está muy acostumbrado a usar, algo elegante para el estilo ‘rockero’ y descomplicado que ha tenido desde que recuerda.  

Luis es abogado y su trabajo actual como auxiliar jurídico en la procuraduría general de nación de la misma ciudad, lo obliga a vestir de esa manera.

Además de abogado, Posso o Possito, como también lo llama mucha gente, especialmente sus amigos, es como él dice -con una risa burlona y un brillo particular en sus verdes ojos- “una estrella de rock”. En realidad podría decirse que es así, o por lo menos una estrella de rock en proceso.

El ambiente musical en el que creció hizo que Luis desarrollara ese gran gusto y buen oído por la música que posee. La mayor influencia que tuvo fue un tío que era un amante del rock, el jazz, el blues y la disco. “Él tenía una colección de discos EP, desde niños escuchamos con mis primos los álbumes más emblemáticos de Pink Floyd, AC/DC, KISS, Survivor, Europe, Alice Cooper, Metallica y hasta el mismo Nirvana. Nos alocábamos a saltar encima de la cama con un par de raquetas de tenis clásicas de madera de nuestras madres imaginando ser una estrella de rock”.

Ese gusto no se quedó solo ahí, desde muy pequeño su interés por tocar alguna clase de instrumento musical se hizo evidente. Ya a los 4 años pertenecía a la banda de guerra del colegio, tocando el redoblante, a los 7 años recibió un piano como regalo de navidad, y después de un tiempo quiso tocar la guitarra y el bajo. “Mi padre me regaló el bajo cuando tenía 12 años, fue tal vez el mejor regalo de mi vida. Siempre me pareció muy interesante tocar” dice Luis.

De forma empírica desarrolló una gran habilidad tocando la guitarra, pero sobre todo tocando el bajo. De esta forma ingresó como bajista a ‘Altazor’, la primera banda en la que tocó: “tocábamos cover’s a bandas de rock en español, comenzamos con eso porque teníamos un conocimiento muy básico de la música, después de uno o dos años con ellos comenzamos a tocar cover’s a bandas de heavy metal más imponentes, después de aproximadamente 7 años no muy continuos con ellos, grabamos un disco”.

Después de este pequeño reconocimiento, en su ciudad natal, Ipiales, y en todo el departamento de Nariño en general, la ‘comunidad metal’ comenzó a llamarlo y solicitarlo para formar parte de varios proyectos musicales y dándole la oportunidad de pertenecer por corto tiempo a bandas como Meguido, Hell Fire, Nigthmare, Ragnarok y Lanzeloth, todas de Nariño. 

La entrada a la antes mencionada ‘Lanzeloth’, una banda con una trayectoria musical de más de 8 años, en ese entonces, le abrió muchas puertas como músico. 

Desde ese momento ha sido convocado para tocar en bandas como Mandragora, Witchcorpse, Desdenia, Adartia, Persefone, Rock Toon’s y Determinación, bandas de gran renombre a nivel nacional y algunas a nivel internacional, además de participar como invitado en grabaciones de bandas como Dark Empire, Alas de Fuego, Resistencia al Olvido (RAO), The Countess Erzebeth, Legend Maker, Terra Sur e Introspección.

Es algo extraña la mezcla de roles que Luis vive a diario, como su novia dice en un tono algo irónico: “Estrella de rock y abogado, una combinación bastante interesante y fuera de lo común en una sociedad tan ‘normal’ como la colombiana”.


“Se sorprenden mucho, la gente no me cree que soy abogado, hay compañeros de trabajo que se asustan cuando yo por cierta razón saludo a metaleros en la calle, si alguien quiere sacarse una foto conmigo, soy muy relajado con eso,  a veces dicen que estoy loco pero me considero muy normal, me gusta la buena música, me gusta tocar, y no entiendo que tiene de malo si llevo tatuajes y camisa y corbata a la vez” dice Luis.

Muchos se preguntan por qué él no estudió música en vez de derecho, la respuesta no es complicada, sus padres no le dieron un apoyo en ese sentido. “Para ellos la música no me va a dar un futuro de éxitos, y es cierto, en Colombia es  muy complicado sobrevivir siendo músico” explica.

Antes de iniciar su carrera de derecho, estudió arquitectura, proceso en el cual tuvo algunos inconvenientes, en ese entonces su futuro le importaba muy poco, fue una “época de descontrol”, como Luis le dice. 

“Un día mi padre me dio a elegir entre si quería seguir desperdiciando mi vida en alcohol y drogas o si de verdad quería ser alguien en mi vida, elegí el camino de ser un abogado, una profesión que, como digo mucho, todo el mundo debería conocer, y profesión que supuestamente es de respeto en esta sociedad prejuiciosa” afirma.

Su padre, el motivo de muchas de sus buenas decisiones, es la mayor influencia que Luis tiene en su vida, y como dice, la mayoría de las cosas las hace pensando en él.

“Papi, yo soy profesional de la música y como hobby soy abogado” entre risas y con algo de orgullo cuenta su padre, Eduardo Posso, la forma en la que su hijo se describe a sí mismo.

Las personas que se mueven en el ámbito musical tienen un gran círculo social y tienen la oportunidad de conocer diferentes lugares y culturas. Luis no es la excepción, conoce gran parte de Colombia, y en todas las partes en las que ha tocado tiene amigos y una puerta abierta a donde llegar.

Esto lo podría afirmar el manager de ‘Lanzeloth’, Fernando Estupiñán, que describe a Luis Eduardo como él, al igual que muchos más, lo ve: “Como persona es un tipo muy centrado en sus cosas, es divertido, espontaneo, como todo muchacho de su edad (23 años), profesional y muy buen ser humano. Como artista es un verdadero expositor del rock, un buen músico, con gran talento en una tarima. Reflejando así la gran persona que es”.

“Mucha gente en la oficina es incrédula sobre muchos anécdotas y lugares que he conocido gracias al rock, a fin de año puede que con ‘Determinación’ haga una gira por todo el continente americano” señala Luis con emoción.

Su sed de conocer nuevas cosas es prácticamente insaciable pues como dice: “uno nunca deja de aprender”. Le gustaría estudiar y profesionalizarse en la música, grabación, composición, masterización y producción. 

Además sueña con ir a Europa, por su riqueza histórica y cultural, y a Japón pues dice que las bandas que pisan esa isla son el trampolín a la fama y el dinero.

Lo que pocos saben sobre esta ‘estrella de rock en proceso’ es que le apasionan el futbol -haciendo todo lo posible por ver los partidos que quiere- y la historia, ya que le interesa conocer y saber de dónde venimos y por ende para donde vamos, sin anticiparse a un futuro, pues dice que lo único seguro es que por nada ni nadie se alejará de la música.

“Estar con mi familia y mis amigos, tomarme un buen whiskey, y escuchar buena música” Luis ve esto casi como la perfección.


Claro que no todo es tan perfecto como suena, como en todos los aspectos de la vida, hay dificultades, pero nada grave. “He tenido algunos problemas personales porque mi novia es muy celosa y ella cree que estoy con todas las mujeres del mundo, con mi familia por que se asustan de que pueda caer en las drogas, y con algunos amigos por cuestiones de tiempo en ensayos o grabaciones, pero nada fuera de lo común”. 


La determinación y seguridad con las que Luis hace todo en su vida son un claro ejemplo de cómo se puede lograr lo que se desee, con esfuerzo y decisión.

Aun cuando Luis es visto con cierta extrañeza por la fusión entre seriedad y rebeldía, cada vez son más los que lo aceptan tal y como es, rompiendo con los paradigmas que la sociedad tantas veces impone.

SONDEO UNIQUINDIANO: AQUÍ NO HAY QUIEN VIVA


Por: Alejandra Marcillo Grajales
Melissa Goyeneche Montenegro


Para una buena parte de los estudiantes de la Universidad del Quindío que no son procedentes de la ciudad de Armenia, vivir en un lugar ajeno a su hogar, se les ha convertido en una especie de odisea, pues no están conformes con el servicio brindado por las personas que arriendan habitaciones.

De 106 estudiantes entrevistados, 58 manifestaron no estar a gusto en el lugar donde residen, representando el 54,71% de esta población, las 42 personas restantes que aluden al 39,62% se sienten cómodos con el servicio.

La mayoría de las inconformidades se presentan por el precio, la comodidad, y la falta de privacidad. Maicol Rosero, estudiante de 1º semestre de lenguas modernas, afirma: “No estoy conforme con los servicios ofrecidos porque muchas de las personas que arrendan habitaciones solo utilizan ese medio como sustento. A veces se exceden en el cobro de los cuartos o en el ahorro de servicios y reglas estipuladas en la casa para que la ganancia sea mayor”.

Muchos de los estudiantes, a pesar de estar iniciando su carrera han tenido malas experiencias en la convivencia, la alimentación, lavado de ropa, y demás prestaciones ofrecidas, por  lo cual han optado por probar suerte en varios lugares, esperando que estos sean mejores.

Ana Milena Vargas, estudiante de 6º semestre de comunicación social- periodismo, cuenta que ha tenido que mudarse por lo menos 7 veces. “Estas experiencias han sido frustrantes, el invertir tiempo para salir a caminar en busca de habitaciones, gastar minutos, tener que venir un tiempo antes de empezar semestre para hacer esto y el tener que adaptarse a otro ambiente y a las reglas que se impongan hacen perder la esperanza de encontrar un lugar donde puedas terminar tu carrera a gusto”.

Las personas que dicen estar a gusto, han tenido lo que podría llamarse “buena suerte” en cuanto a esta situación y se sienten bastante cómodos con el ambiente en el que viven, mientras los demás siguen su búsqueda.



ENTREVISTA A ELIANA MILENA AGUDELO


ENTRE PASOS Y LIBROS

Por: Alejandra Marcillo Grajales








La danza: “Un pasatiempo no tan pasatiempo”

Esta calarqueña de 19 años, estudiante de Comunicación social- periodismo de V Semestre en la Universidad del Quindío nos cuenta sus experiencias haciendo lo que más disfruta: bailar.




Alejandra Marcillo: ¿A qué edad empezaste a bailar?
Eliana Agudelo: Yo empecé a bailar desde muy pequeña, desde que estaba en el colegio.

AM: ¿Cómo empezó tu gusto por la danza?
EA: Lo mas chistoso de que yo sea bailarina y que me guste tanto, es que en mi casa nadie nunca había bailado, es más, en mi casa nadie tiene que ver tampoco con la comunicación pero yo siempre me fui como muy aparte de todo lo que han hecho allá, en mi casa hay contadores, profesionales de salud ocupacional, en fin, pero nada que tenga que ver con lo que yo hago. Simplemente cuando chiquita empecé, los profesores me veían talento y me ponían de personaje principal en las danzas, en el teatro, en todo ese tipo de cosas y me empezó a gustar, seguí y después mi profesor de  Danzar me vio bailando con las danzas del  colegio y  me dijo que me veía bien y que quería que fuera allá, él me ha ayudado mucho y me ha animado muchísimo para seguir formándome en la danza.

AM: ¿Cómo ha sido el apoyo familiar con respecto a la danza?
EA: Mi mama y mi papa han sido una gran ayuda porque me dan todo lo que necesito para bailar, a veces uno necesita maquillaje, vestuario o lo que sea. No me ponen problema cuando paso todo el día por fuera de la casa, siempre van a verme en mis presentaciones, son apoyo muy grande y siempre están orgullosos de mí.

AM: ¿Qué géneros bailas?
EA: En el colegio toda la vida bailé folklore, después, hace 4 años aproximadamente entré a la corporación cultural Danzar y ahí empecé en un ámbito más profesional de la danza. Hace 2 años y medio que entre a la universidad a estudiar y me registré en el grupo de baile moderno y luego al grupo representativo, ahí me dieron la beca del 100% de la matricula como un beneficio adicional y empecé con la danza moderna y la danza popular que son la salsa, la bachata, el merengue, el tango y el paso doble.

AM: ¿Qué otro género te gustaría aprender a bailar?
EA: Un genero en especifico, no. Pero me gustaría mucho aprender algo diferente como acrobacia aérea en telas, ese ha sido también uno de mis sueños.

AM: ¿Por qué no seguiste una carrera profesional como bailarina?
EA: Yo la he seguido desarrollando pero a la par con la carrera académica porque aquí no hay donde estudiar artes, no hay un sitio donde uno se haga profesional en artes acá en armenia y es más difícil irme a otro lado a estudiar, además porque yo considero que uno debe formarse integralmente y que estudiar hace falta, no solo bailar porque después me vuelvo viejita y con qué me voy a sostener.

AM: ¿Cómo te sientes cuando bailas?
EA: Yo me siento viva, eso es lo que me rescata de la monotonía, me relaja, se me olvida el resto del mundo y me dedico a bailar  y a sentirme bien.

AM: ¿Siempre quisiste estudiar Comunicación social-periodismo?
EA: Yo quería estudiar psicología o comunicación y me presenté a la Nacional para psicología  pero no pase por 18 punticos (risas) entonces empecé a estudiar comunicación social y la verdad estoy feliz de haberme quedado en comunicación porque me gusta muchísimo.

AM: ¿Qué es lo que más te gusta de la carrera?
EA: A mí me gustan mucho los medios, me gusta mucho la radio y la prensa.

AM: ¿Has pensado en mezclar estos dos campos?
EA: Si, y los combino, hacemos fotografías bailando; en estos días vamos a hacer algo para los de séptimo, que necesitan hacer un film minuto, y voy a ser la protagonista; ayudo cuando hay eventos de danza en la organización teniendo en cuenta lo que me han enseñado aquí,  ayudo con la redacción.

AM: ¿Cómo organizas tu tiempo entre el estudio y la danza?
EA: A nosotros acá en la universidad nos exigen mucho tiempo, entonces se hace difícil llevar la danza con la carrera porque tengo ensayo tres veces a la semana, aparte de eso a la hora y el día que resulte presentación uno tiene que ir porque con tres faltas quitan la beca, entonces es una obligación muy pesada, pero hay que disfrutarla. Gracias a eso yo me pago los estudios y mi mamá solo me tiene que dar para los pasajes.

AM: ¿Cómo ha influido en tus calificaciones tu dedicación al baile?
EA: Primero que todo tengo un buen grupo de trabajo y siempre me colaboran, me esperan para hacer los trabajos y segundo, me toca dedicarme y trasnochar o estar en la universidad todo el día, dedicarle mucho tiempo a las dos cosas, me la paso estudiando y bailando.

AM: ¿Qué significa la danza en tu vida?
EA: Yo lo tengo como un pasatiempo no tan pasatiempo (risas) pues es una prioridad y pienso en lo posible no dejarlo, hacer el máximo esfuerzo por llevar siempre de la mano  la vida laboral y la estudiantil con la danza, ese es mi propósito, no dejarla a un lado.

AM: ¿Cuáles son los planes que tienes con respecto a la danza en un futuro a corto y a largo plazo?
EA: Me gustaría dedicarme más al tango pues me parece un género muy apasionante; quisiera ir a un concurso nacional de tango que se realiza en Manizales pero para eso necesito mas preparación esa es una de mis metas a mediano plazo. Mi sueño a largo plazo es tener una escuela de danza en donde yo sea la directora y pueda tener profesores para darle clases gratuitas a los niños.

AM: ¿Has participado en concursos de danza, si lo has hecho como te ha ido?
EA: Haciendo danza folklórica hemos estado en encuentros internacionales y nacionales. Y ahora en la universidad por primera vez participe en un concurso nacional de salsa y tango que se hace aquí en la universidad, se hizo la semana pasada y  fue una experiencia muy chévere por primera vez concursar en un género que uno no practico mucho, aunque no ganamos porque hay gente que tiene más trayectoria, sobre todo en la salsa.

AM: ¿Qué lugares te ha permitido conocer la danza?
EA: He ido a muchos sitios del país gracias a la danza y fuera del país he estado en Perú y en Chile, en Lima Perú en el 2009, Tacna Perú  y Arica Chile en un festival  que se llama Festiandina.


AM: ¿La academia de danza les patrocina los viajes?
EA: Es difícil porque nosotros somos una corporación cultural independiente. Conseguimos algunos recursos de la gobernación, las alcaldías, pero no son muchos, así que hacemos rifas, trabajar, hacer presentaciones y guardar la plata para hacer los viajes

AM: ¿Cómo ha sido tu experiencia conociendo otras culturas?
EA: Es muy chévere porque si uno trabaja el folklore y defiende su país, puedes conocer a la gente que mantiene viva la tradición de otros lugares, que además es muy diferente, te da ánimo para seguir haciendo lo que haces y para trabajar mucho más fuerte. Culturalmente hay unas cosas muy bonitas, conocí grupos de Argentina, de Chile, de Venezuela, Perú, Ecuador, en general de toda Latinoamérica, conocí las danzas folklóricas de cada sitio, las costumbres, como tomar vino todo el día, con todas las comidas, hasta me dio una infección intestinal (risas) porque la comida era muy diferente y mi estomago no resistió, pero sin embargo fue muy chévere.

AM: ¿Aparte de estas actividades, qué otros pasatiempos tienes?
EA: Me gusta el ciclismo pero no practico muy seguido, por la u, pero me gusta hacerlo los fines de semana. Igual no en competencia ni nada, sino como por hacer deporte y relajarme.

AM: ¿A quién admiras en el mundo de la danza?
EA: Yo admiro muchísimo a mi maestro, al director de los grupos donde bailo, se llama Víctor Hugo López, lo admiro mucho porque él ha hecho de la danza, su vida y hace muy buenas labores por el arte en el departamento.


Uniquindío se une a la celebración del día internacional de la danza

UNA CELEBRACIÓN MUY ESPECIAL

Por: Alejandra Marcillo Grajales


Haciendo un recorrido por todo el país, entre bambucos, pasillos, guabinas, currulaos, cumbias y más, la Compañía Artística Estímulo, de la ciudad de Cali, integrada por jóvenes artistas con discapacidad cognitiva, participaron en la celebración del Día Internacional de la Danza, realizada en el auditorio de Ciencias Básicas de la Universidad del Quindío el jueves 26 de abril de 2012.

Las Danzas Colombianas hacen parte de la riqueza del folklor Colombiano y Latinoamericano. Son tan variadas y de orígenes tan diversos que llegan a distinguir a cada una de las regiones geográficas de Colombia, convirtiendo la cultura colombiana en una de las más ricas del mundo. 

El Día Internacional de la Danza fue proclamado por la Unesco en 1982 y se celebra el 29 de abril de cada año. Fue establecido por el Comité de Danza del Instituto Internacional del Teatro de la Unesco con el fin de atraer la atención sobre el arte de la danza. 

“Es un día de fiesta que celebran todos los países del mundo con espectáculos especialmente dedicados a la danza a través de: clases abiertas, ensayos al aire libre, conferencias, exposiciones, publicaciones en diarios y revistas, bailes populares, programas en radio y TV, espectáculos callejeros, entre otros” dijo Víctor Hugo López, director de la Corporación Cultural Danzar. 

En esta ocasión Armenia celebra este día tan especial toda una semana, con una programación que empieza el día jueves 19 de abril con un concurso nacional universitario de baile por pareja, y finaliza el domingo 29 de abril con la celebración oficial del día de la danza en una velada dancística.

El evento en general es organizado por la Corporación Cultural Danzar, con apoyo de: Gobernación del Quindío,  Secretaría de Cultura Departamental,  Fondo Mixto para la Promoción de la Cultura y las Artes del Quindío, Alcaldía de Armenia, Corporación de Cultura y Turismo de Armenia, Universidad del Quindío, Coordinación de Cultura y Sándwich QBANO.

La presentación de la Compañía Artística Estimulo tuvo un gran éxito entre la comunidad universitaria, empezando a las 7:00 PM y finalizando a las 9:15 PM. Víctor Hugo López cuenta con orgullo lo que estos invitados tan especiales han realizado en su trayectoria artística: “Este reconocido grupo ha participado en concursos de baile en Europa y Latinoamérica, dejando muy en alto el nombre de Colombia ante el mundo, estamos orgullosos de que estén en nuestra ciudad celebrando este día tan importante”.

El área de cultura del Bienestar Institucional de la Universidad del Quindío ayudó en la organización del evento y lo promocionó para mayor  asistencia al auditorio.

Con ternura y profesionalismo a la vez, los jóvenes de Estimulo cautivaron e inspiraron al público, que aplaudía, animaba y apoyaba el espectáculo.

Miguel Arce, estudiante de ingeniería civil de la Universidad del Quindío y asistente al evento, dijo que era la primera vez que asistía a un programa como este, pero que le pareció algo muy bueno y seguiría frecuentando estas programaciones culturales.

Tanto este como varios estudiantes de diferentes carreras, dijeron sentirse orgullosos de que la universidad realice y apoye esta clase de eventos. “Me parece que estos actos alimentan la cultura de la gente, es gratificante que se realicen en nuestra universidad” dijo Mabel López, estudiante de trabajo social de la Uniquindío. 

PENSANDO EN ABANDONO

Por: Alejandra Lorena Marcillo Grajales


Abandono es la falta de atención a las necesidades básicas de un niño. Cada año, cientos de niños sufren maltrato y abandono en Colombia.


Luego de solo tres semanas de dar a luz a una bebé que llamó Sofía, Mónica, una mujer de 36 años, llegó a una de las tiendas del barrio Providencia el día 10 de marzo de 2012 con la niña en brazos, acompañada de dos mujeres más, pidió algunas cervezas y se sentó a jugar cartas con sus amigas, mientras la pequeña temblaba de frio e inhalaba el humo de los cigarrillos que su mamá fumaba. 

Mónica había tomado la decisión de abandonar a su hija pues decía que no necesitaba más problemas en su vida y Sofía solo era uno más. La mujer no dio ninguna información sobre el padre de la niña y no quiso responder a más preguntas.

Doña Otilia, la dueña de la tienda, encantada con la bebé y conmovida con la situación de esta dijo que si no había ningún problema, ella iba a cuidar a la niña. La madre sumida en su desinterés aceptó y dijo que volvería el día siguiente con las pocas pertenencias de la pequeña.

El domingo 11 de marzo Mónica volvió acompañada no solo por su hija sino también por  la abuela de ella, quien indignada con todo lo que había pasado el día anterior pidió disculpas a la dueña de la tienda y afirmó que su hija no estaba en condiciones de tomar una decisión de tan grandes magnitudes, dijo que ella iba a hacerse cargo de la niña por un tiempo hasta que Mónica reflexione y cambie su forma de pensar.

El abandono en Colombia tiene cifras muy altas y son los adolescentes los que más cometen estos delitos, pero también son cometidos por adultos motivados por circunstancias múltiples como extrema pobreza, desempleo, vivir la situación de desplazados, la no planeación del número de hijos, promiscuidad sexual, entre otras. 

En este caso no se sabe la razón exacta que llevó a Mónica a tomar tan precipitada decisión. La mujer que se está haciendo cargo de Sofía volvió junto a ella a la tienda de doña Otilia le agradeció por su preocupación, le pidió disculpas nuevamente y le dijo que la visitaría frecuentemente.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

CRÓNICA UNIQUINDÍO
“AUTOMUTILACION”
Escrito por: Alejandra Marcillo Grajales
Alumna de Comunicación Social, Universidad del Quindío, 2010 
                                                             
UN VICIO COMO CUALQUIER OTRO

“La expresión interna de un grito interno”. Cielo Latini.
Una conducta compulsiva y adictiva al igual que las drogas.

La automutilación, también llamada autolesión, autoflagelación o self- injury en ingles, es un trastorno psicológico que consiste en infringirse daño, sin intención de cometer suicidio. En la ciudad de Armenia, Colombia, vive María José Cifuentes, una joven de 17 años, que como muchas personas en el mundo, posee este grave trastorno. Esta es una conducta compulsiva y adictiva que al igual que las drogas, lleva a un aumento gradual de su práctica. Aunque no sea socialmente aceptado, dicho comportamiento es más común de lo que parece, se ha presentado, en mayor proporción, según estadísticas de la Cornell University, Nueva York, en jóvenes de 13 a 15 años del género femenino.
En la ciudad de Armenia Colombia vive María José Cifuentes una joven de 17 años, estudiante del grado once en el colegio INEM. Ella al igual que muchos jóvenes de su edad posee este grave trastorno psicológico, aparentemente lleva una vida normal, tiene una vida social activa, afirma no pertenecer a ninguna ‘subcultura’ en la que algunas veces se cree que se autolesionan como los ‘emos’ o los ‘góticos’, vive con sus dos padres y sus dos hermanas menores, tiene muy buenas calificaciones en el colegio, incluso, al graduarse sueña con estudiar arquitectura. Muy pocas personas se imaginan la clase de trastorno que Mª José posee.
Ella, desde muy corta edad, hacia junio de 2000 aproximadamente, empezó a sufrir de depresiones muy graves, María José dice: “Desde que tengo memoria he sufrido de muchas depresiones, los psiquiatras me han recetado fuertes medicamentos para controlarlo, pero solo lo hacen por un momento, así que decidí buscar una salida -expresando mi dolor en mi cuerpo-. Un día estando yo en internet encontré algo sobre este tema de la automutilación que la verdad me tranquilizó mucho por que descubrí que no era la única que lo hacía. En esto encontré una especie de apoyo, ya que descubrí que podía contarle a gente igual que yo, lo que me pasaba”.
Majo, como me pidió que la llamara, dice que cree que las depresiones surgieron al principio por falta de sus padres en su vida, ya que ellos mantienen muy ocupados y casi no comparten tiempo con ella. Dice que los compañeros del colegio, que son los únicos que conoce, “no la comprenden” y que eso la hace sentir muy sola. Además de que físicamente empezó a sentirse diferente a las demás niñas de su edad y hasta de sus hermanas con las que casi no habla, diferente, dice, de una manera “fea”.
Ya que los medicamentos recetados por los médicos para la depresión, no eran muy eficaces, Majo, en agosto del 2005, desde la corta edad de doce años empezó a autolesionarse. El Truth Hurts, realizado por la Camelot Foundation y la Mental Health Foundation, en Europa, revela que la edad media a la que empieza esta conducta es los 12 años, pero incluso hay niños de cinco y siete años que lo hacen. “Empecé, -dice- rasguñándome superficialmente los brazos con mis uñas, superficialmente porque la verdad sentía mucho dolor al hacerlo, lo hice de esta manera durante un poco más de un año, hasta que empecé a comprar licor para que mi cuerpo se adormeciera y así no sentir tanto dolor. Después de un tiempo compré una navaja, y empecé a cortarme los brazos, al hacerlo me sentía bien, ya no sentía dolor debido al licor que ingería, un día mi mamá descubrió que estaba un poco tomada y me regañó mucho, en ese momento me empecé a cortar no solo mis brazos sino también mis piernas”.






Se han encontrado alarmantes cifras sobre los familiares y allegados de las personas que se automutilan, ellos prefieren ignorar el tema, por un simple miedo a resultar afectados por él. Ron Best (2005), profesor de educación en la Universidad Roehampton, dijo: “Es similar al abuso sexual infantil en los años 80, la gente no tiene idea de que está pasando a menos que se enfrente al problema. La realidad es que cuando descubren que un chico se estuvo lastimando, prefieren ignorar el tema en lugar de abordarlo, no quieren hacerse cargo de la cuestión”. “Discutir la autoflagelación con ellos puede tener un impacto psicológico en las personas”. Majo tiene suerte de que este no sea el caso de su madre.

La madre de María José, la señora Consuelo Perdomo, afirma haberse enterado desde hace muy poco de la situación de su hija, una mañana hace solo seis meses, hacia mayo de 2010, cuando entró en su habitación y vio los cortes q ella tenía en sus brazos. Doña Consuelo dice que toda la vida pensó que su hija era una persona reservada y conservadora ya que se vestía de tal manera que no dejaba ver mucha piel al descubierto, incluso en los días calurosos. “Tal vez fue la música tan estruendosa que escucha lo que le hizo pensar esas bobadas” afirma Consuelo. El líder de la banda Slipknot, Corey Taylor, ha negado que la música y letras de la banda alienten a los jóvenes a la autoflagelación: “Si estás dispuesto a lastimarte a ti mismo, no es la música lo que lo está ocasionando,” señaló.

Doña Consuelo dice: “Aunque yo sabía que mi hija tenía problemas con este asunto de la depresión, nunca pensé que llegaría a tal punto de lastimarse a sí misma, incluso llegué a pensar que la depresión de Majo era algo que había quedado en el pasado, ahora me doy cuenta que lo de la ropa es solo para esconder las marcas de su cuerpo”. La psicóloga Cecilia Quero Vásquez (2008), explica: “Alguien con depresión profunda puede comenzar a agredirse para desplazar el dolor emocional que le resulta insoportable, y lo transforma en una experiencia física que siente que puede controlar mejor, ya que la profundidad, número y tamaño de las lesiones obedece a una decisión personal. También hay ocasiones en que encontramos individuos que se hacen heridas porque consideran que es una forma de ‘entrenarse' en el manejo de experiencias difíciles y tristes”.

“La depresión, produce una dificultad para sentir sentimientos positivos (alegría, placer, goce, entusiasmo, deseo), por el contrario, deja intacta la capacidad de sentir lo desagradable (un ruido molesto, una contrariedad, lo penoso y trabajoso, el trato hostil o áspero de los demás). Cuando la persona, por su talante anterior, guarda las apariencias y no dirige la rabia hacia el exterior, la vuelve un comportamiento autolesivo”, Catalán Bitrian (2003). Majo dice: “tal vez solo lo hago para liberar todo lo que siento por dentro, la tristeza, la rabia y la impotencia que me mata internamente al no poder cambiar la historia de mi vida”.

Hacia mayo de 2010, María José al darse cuenta de que su mamá se enteró de lo que le sucedía no vio otra salida que empeorar su propia situación, haciéndose cortes todavía mas profundos y en otras partes del cuerpo, al mismo tiempo en el que le negaba todo. “solo sentía demasiado miedo de la reacción de mi mamá, no me asustaba que le contara a mi papá, porque yo se que a él no le importa lo que pase conmigo, lo que más me asustaba era que mi mamá me llevara a una especie de ‘manicomio’, por así decirlo, en el que se encuentra mi tía Martha, ella sufre de una enfermedad mental que en este momento no recuerdo como se llama, eso de verdad me asustaba mucho”. Dice Majo.

“Mi mamá empezó a volverse algo histérica respecto a esta situación, yo solo le decía: ‘mamá no me moleste, son solo rasguños del gato de Jessica’, mi supuesta mejor amiga, hasta que empecé a cansarme de esto, y al final, exactamente hace dos meses en septiembre de 2010 le conté todo. Ella no sabía qué hacer, le dije que no hiciera nada, que esto era mi problema y yo podía salir sola de él, por unos días se tranquilizó, pero un día como 3 semanas después, tuve un pequeño accidente con una navaja y casi me desangro. Me llevaron al hospital, me curaron, y luego volví donde el psiquiatra, el cual como siempre no me sirvió de nada.” Afirma María José.

Desde entonces María José y Doña Consuelo, su madre, van juntas a algunas terapias con diferentes psiquiatras, las cuales han disminuido un poco los episodios de automutilación de Majo. Ella dice que desde entonces su mamá se ha acercado mucho a ella, y eso la hace sentir mucho mejor. Doña Consuelo dice que hará lo que sea posible para que su hija se comporte como debe y deje de hacer eso, porque le sigue preocupando mucho el asunto del suicidio que puede llegar a cometer su hija, además de un posible alcoholismo.

María José afirmó haber recibido medicamentos para la depresión, que no le daban un buen resultado, entre estos medicamentos se encontró uno que no era para la depresión sino para la epilepsia. Un estudio realizado por investigadores del Charité University Medical Center de Berlín (Alemania), ha demostrado que los nuevos fármacos para la epilepsia como levetiracetam, topiramato o vigabatrin, aun mas que los demás, aumentan el riesgo de que los pacientes se autolesionen o muestren conductas suicidas. Yo pienso que tal vez estos medicamentos hayan ayudado a que la situación de Majo empeorara. Además de esto, ya se encuentra un antecedente familiar, una tía materna, posee también depresiones, episodios esquizofrénicos y psicosis (las personas con esquizofrenia tienden a la automutilación), lo cual la llevó a ser internada en un centro médico para enfermedades mentales fuera del país.

Para los años 2007-2009, en Colombia un 11,7 % de los pacientes que acuden a un servicio de urgencia por una conducta auto-lesiva, presentan laceraciones auto-infringidas. Al revisar esta cifra, pero incluyendo hospitales cárceles e instituciones asilares la auto laceración da cuenta del 17,5% de las conductas auto-lesivas. Los que buscan ayuda se encuentran con el ridículo y el desprecio, de ahí que lo lleven en secreto. Por este motivo, se cree que las cifras están infravaloradas, es decir, que en un aula de 40, puede que haya más de cuatro que se corten, se quemen, se arañen, se muerdan, para aliviar su ansiedad, y sin que nadie lo sepa. Un estudio realizado en la Cornell University de Nueva York, demostró en el actual año 2010 que el comportamiento auto-lesivo se presenta en mayor proporción en jóvenes de 13 a 15 años de género femenino como se puede observar en la siguiente tabla:



Personas con índices de automutilación según edad y sexo

GRUPOS DE EDADES
FEMENINO
MASCULINO
TOTAL
%
Menos de 10 años
1
3
4
4,70
10 a 13
20
3
23
28,2
13 a 15
41
4
45
54,7
mayores de 15 años
7
6
13
14,1
total
69
16
85
100

«Nos faltan datos, pero creemos que está mucho más extendido de lo que parece», dijo Janis Whitlock, directora del proyecto de investigación sobre comportamiento autoagresivo de la Cornell University, en Nueva York.

“Ahora sigo las terapias, y he vuelto a cortarme muy pocas veces desde entonces, dejar la automutilación es mucho más difícil de lo que es empezar, yo quiero dejarlo pero me cuesta mucho cada día. El asunto del alcohol es muy diferente, porque nunca llegué a enviciarme tanto con él como lo hice con los cortes, aunque también estoy en terapias para no caer en eso”, afirma Majo. En un futuro se espera que la joven María José Cifuentes continúe correctamente con las terapias, se espera también que su madre la siga apoyando como ha venido haciéndolo desde que se enteró. Claro que con temas como estos siempre son posibles las recaídas, pero personalmente considero a María José una persona muy fuerte y con mucha fuerza de voluntad y aunque sea difícil para ella y las personas cercanas a ella, sé que va a lograr terminar totalmente con este problema.








Referencias bibliográficas:


Catalán Bitrián, José Luis. (2003) 05-20. Conducta y depresión. http://www.cop.es/colegiados/A-00512/conducta.html.

Quero Vásquez, Cecilia. (2008) 06-12. Autolesión: El dolor como remedio. http://www.saludymedicinas.com.mx/nota.asp?id=1739.

Best, Ron. (2005) 01-25. The Observer. Alarmante epidemia de autoflagelación entre los jóvenes británicos. http://edant.clarin.com/diario/2005/01/25/conexiones/t-910020.htm.
http://www.youtube.com/watch?v=7ODo4pnl78Q&feature=related